Aunque veremos los síntomas más habituales de un caudalímetro averiado o sucio, lo mejor es acudir a un taller con máquina de diagnósis para detectar averías. Debes saber que hay otras averías que pueden dar los mismos síntomas que veremos aquí.
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¿Cómo saber si falla el caudalímetro?
Al estar conectado eléctricamente a la centralita del motor, cuando hay un mal funcionamiento en este sensor el coche sigue funcionado pero en modo emergencia.
Muchos vehículos disponen de un testigo luminosos que indica avería en el motor, y en caso de fallar se iluminaría. De todas formas, ese testigo sirve para diferentes problemas del motor.
Puedes intuir problemas en este sensor si:
- Percibes una considerable pérdida de potencia.
- Ves que por el tubo de escape sale humo muy oscuro o negro.
- Notas alteraciones en el funcionamiento del motor, como por ejemplo una marcha irregular del mismo estando al ralentí.
- Hay obstrucciones en la admisión, normalmente producidas por una acumulación de suciedad en el filtro del aire.
¿Se puede reparar el caudalímetro?
Si tras realizar la diagnosis se comprueba que la avería está en el caudalímetro lo deberás sustituir por otro, ya que se trata de una pieza que no tiene reparación al ser un sensor muy sensible.
Aunque no se aconseja, en ocasiones una limpieza puede solucionar temporalmente los problemas si sólo es por suciedad. De todas formas, también suele romperse el filamento obligando a cambiar el sensor MAF.
Consejos de mantenimiento
Debes tener en cuenta que el caudalímetro no se puede mojar ni limpiar con productos que contenga aceite. Cuanta más humedad exista en el ambiente más probabilidades de que se produzcan fallos